Interesante Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales (Juzgado de Propiedad Intelectual), sobre coautoría y Propiedad Intelectual, comentada por IpKat. Recuerda qué es una obra en colaboración, en el mundo anglosajón, donde se crea la mayor parte del contenido audiovisual que vemos; por tanto, tiene repercusión general.
Sigue el contencioso sobre la autoría de la película FLORENCE FOSTER JENKINS, con Meryl Streep y Hugh Grant. Es la historia de una millonaria de Nueva York que quería cantar en publico y organizaba (y financiaba) sus propios conciertos, abiertos al público, a pesar de su mala voz.
En un blog de 6 Diciembre 2017, ya comentamos que el guionista Nicholas Martin y su entonces pareja, la cantante Julia Kogan, discuten la autoría del texto de la obra. La Sra. Logan se considera co-autora, porque dio ideas al guionista y enriqueció los diálogos y el resto del guión.
En Sentencia de 2017, el Juzgado de Propiedad Intelectual denegó la coautoría de la Sra. Kogan. La Sentencia fue apelada y el Tribunal de Apelación ordenó que se volviesen a examinar las pruebas.
Nueva Sentencia. Coautoría del guionista y su colaboradora
La nueva Sentencia de 8 Diciembre 2020 del Juzgado de Propiedad Intelectual reconoce, ahora, la coautoría. Deja claro que el guión fue resultado de la colaboración entre ambas partes: un proyecto común, en cuanto al esquema general y un trabajo compartido.
El Juez considera que el guionista Martin redactó la mayor parte del texto, en su sentido literal, pero su pareja participó en la creación del guión. Dio forma al contenido dramático. La Sra. Kogan aportó elementos valiosos, como la musicalidad del guión y la interacción de los personajes. Ambos trabajaron conjuntamente importantes elementos creativos: personajes, sentimientos, acontecimientos y contenido musical.
La Sentencia concluye que la Sra. Kogan era más que una investigadora, correctora de pruebas o caja de resonancia. Sus aportaciones eran, en calidad de autora. Creó, seleccionó y recopiló conceptos y emociones en detalle, después recogidos por escrito; aún cuando no los escribiese ella.
Santiago Nadal